Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. 1 Juan 5:4.
Estas palabras son como el ancla para mantenernos en medio de un mundo que como mar embravecido nos golpea muy fuerte. Es la fe en las promesas de Dios la que nos sostiene, la fe que enseña la Biblia, más que un conocimiento intelectual es una convicción del corazón, mas que una idea religiosa es una relación de nuestra vida con el Dios creador, más que una emoción que agita nuestros sentimientos es una experiencia del alma, esa fe que viene del conocimiento que tengamos de la Biblia.
Romanos 10:17 dice que la fe viene por el oír la palabra de Dios. Esa fe llega a nuestra vida como una lluvia del cielo que cae sobre nuestra reseca y adormecida conciencia, la cual empieza a “ablandarse” como un terreno fértil donde empieza a nacer la esperanza, y nos hace ver que Dios, más que un concepto religioso es un ser real, pero más que un ser real entendemos que Él nos ama tanto que envió a su único Hijo, el Señor Jesucristo a morir en una cruz por nuestros pecados, el cual resucitó y está vivo ahora, y que no estamos solos en medio de este convulsionado mundo, pero además de esto, la fe nos hace ver que ese Dios tan grande creador de todas las cosas, es a la vez un Dios personal con el cual puedo tener comunión.
Que me conoce a la perfección, que sabe de mis tristezas y alegrías, que me oye cuando hablo en oración y que sus promesas llenan el vacío de mi alma y la falta de paz interior que tanto atormenta, y que no solo me acompaña en mi día a día sino que me da esperanza para el futuro y para la eternidad, esa verdadera fe me hace vencer los temores de mi alma por el más allá; porque su palabra me dice que ese Dios es grande eternamente y para siempre y que no solo me acompañará acá en esta vida sino que me guiará aun más allá de la muerte, Salmos 48:14.
Por esa verdadera fe, millones en el mundo han dado y estamos dispuestos a dar nuestra vida si es necesario. Es la fe que ha cambiado positivamente la vida de millones de personas, gente como usted y como yo que hemos tenido que enfrentar situaciones adversas, tristezas, preocupaciones, temores, etc.
La fe en el Dios de la Biblia nos da esperanza, fortaleza y seguridad para seguir adelante, como dice Salmos 3:4. “Busqué al Señor, y el me oyó, y me libró de todos mis temores”, Vos que vas por este mundo complicado, solo la fe en el verdadero Dios podrá sacarte adelante, porque esa es la victoria que ha vencido y vencerá al mundo NUESTRA FE… AMEN.
Dios te bendice.-
Estas palabras son como el ancla para mantenernos en medio de un mundo que como mar embravecido nos golpea muy fuerte. Es la fe en las promesas de Dios la que nos sostiene, la fe que enseña la Biblia, más que un conocimiento intelectual es una convicción del corazón, mas que una idea religiosa es una relación de nuestra vida con el Dios creador, más que una emoción que agita nuestros sentimientos es una experiencia del alma, esa fe que viene del conocimiento que tengamos de la Biblia.
Romanos 10:17 dice que la fe viene por el oír la palabra de Dios. Esa fe llega a nuestra vida como una lluvia del cielo que cae sobre nuestra reseca y adormecida conciencia, la cual empieza a “ablandarse” como un terreno fértil donde empieza a nacer la esperanza, y nos hace ver que Dios, más que un concepto religioso es un ser real, pero más que un ser real entendemos que Él nos ama tanto que envió a su único Hijo, el Señor Jesucristo a morir en una cruz por nuestros pecados, el cual resucitó y está vivo ahora, y que no estamos solos en medio de este convulsionado mundo, pero además de esto, la fe nos hace ver que ese Dios tan grande creador de todas las cosas, es a la vez un Dios personal con el cual puedo tener comunión.
Que me conoce a la perfección, que sabe de mis tristezas y alegrías, que me oye cuando hablo en oración y que sus promesas llenan el vacío de mi alma y la falta de paz interior que tanto atormenta, y que no solo me acompaña en mi día a día sino que me da esperanza para el futuro y para la eternidad, esa verdadera fe me hace vencer los temores de mi alma por el más allá; porque su palabra me dice que ese Dios es grande eternamente y para siempre y que no solo me acompañará acá en esta vida sino que me guiará aun más allá de la muerte, Salmos 48:14.
Por esa verdadera fe, millones en el mundo han dado y estamos dispuestos a dar nuestra vida si es necesario. Es la fe que ha cambiado positivamente la vida de millones de personas, gente como usted y como yo que hemos tenido que enfrentar situaciones adversas, tristezas, preocupaciones, temores, etc.
La fe en el Dios de la Biblia nos da esperanza, fortaleza y seguridad para seguir adelante, como dice Salmos 3:4. “Busqué al Señor, y el me oyó, y me libró de todos mis temores”, Vos que vas por este mundo complicado, solo la fe en el verdadero Dios podrá sacarte adelante, porque esa es la victoria que ha vencido y vencerá al mundo NUESTRA FE… AMEN.
Dios te bendice.-
